El presidente Luis Arce descartó este miércoles asistir al congreso alentado por el expresidente Evo Morales en Lauca Ñ, porque -explicó- “los dueños (del instrumento político MAS-IPSP) no van a estar” al habérseles marginado de la convocatoria como organizaciones sociales matrices y “reducir al mínimo” su presencia en el encuentro de octubre.
“En esas circunstancias es muy difícil que podamos asistir a un congreso donde los dueños no van a estar, es como de pronto han construido su casa y ahora los han sacado, no podemos asistir a una casa donde no van a estar los verdaderos dueños, las organizaciones sociales”, afirmó en conferencia de prensa en Casa Grande del Pueblo y en respuesta a la invitación para participar del cónclave en el que se elegirá a la directiva del MAS.
Morales convocó a congreso para el 3, 4 y 5 de octubre en Lauca Ñ. La propia dirigencia de los campesinos, interculturales y mujeres “Bartolina Sisa”, que están reconocidos en el Estatuto del MAS, denunciaron que no se cumplió el Estatuto para la convocatoria, porque no fueron consultados. Además, revelaron que su cupo de delegados se redujo a 5, cuando en similar congreso de 2016 el número llegaba a 200 por organización.
Justamente estas preocupaciones hicieron conocer los dirigentes del Pacto de Unidad, bloque de organizaciones sociales que respaldan al Gobierno, a Arce y al vicepresidente David Choquehuanca en la reunión del lunes, donde no estuvo Morales, pese a estar invitado. En esa cita también decidieron no acudir al congreso de Lauca Ñ.
Para Arce, “la representación de las organizaciones sociales está disminuida al mínimo”, pese -recordó- a que la lucha de estos sectores sociales dio, justamente, nacimiento e impulso a la construcción del Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos IPSP-MAS.
Hasta el 2016, cuando las organizaciones estaban ampliamente representadas y con poder de voz y decisión en el congreso tenían 2.870 delegados, pero ahora llegarán a unos 130. “¿Quién decide, entonces, la historia del MAS? No son las organizaciones sociales, sino son las departamentales del MAS, que antes tenían 750 representantes, ahora tienen 1040”.
“Hay un cambo radical y brusco en los componentes de quienes van a participar en el congreso para decidir la historia del MAS, eso preocupa a las organizaciones sociales”, insistió y afirmó que el respaldo de las organizaciones al Gobierno encuentra explicación en que, a diferencia de la dirigencia del MAS, son reconocidas como dueñas del instrumento político.
“Ese instrumento político es de las organizaciones sociales, a las que nosotros reconocemos”, afirmó y recordó que son la base social de su administración.
FUENTE: ABI