Pescadores del río Beni exigen detener actividad minera ilegal y respaldar sus derechos a la pesca

El primer Encuentro de Pescadores del rio Beni, que reunió a más de una decena de asociaciones de pescadores de los municipios de Rurrenabaque y San Buenaventura, así como comunidades indígenas ribereñas del Concejo Indígena del Pueblo Tacana (CIPTA), de la Organización de Comunidades Indígenas Tacanas de Ballivián (OCITB) y del pueblo Ese Ejja, exige en un pronunciamiento, detener toda actividad minera que se realiza de manera ilegal en los ríos Beni, Tuichi, Quiquibey, Quendeque y Kaka, además de respaldar su derecho a la pesca y la importancia que tiene el sector para la seguridad alimentaria de la región y de Bolivia.

El encuentro, realizado en su primera versión, se desarrolló el viernes 12 y sábado 13 de abril en ambientes del Gobierno Autónomo Municipal de Rurrenabaque y tuvo el respaldo de la Central de Pueblos Indígenas de La Paz (CPILAP). Reunió a  11 asociaciones de pescadores y comerciantes de pescado que discutieron, entre otros temas, la problemática relacionada al uso del mercurio y la minería ilegal que afecta varias regiones de la cuenca del río Beni que tiene una superficie de más de 130 mil kilómetros cuadrados.

En el documento firmado por los representantes de las 11 asociaciones de pescadores de la cuenca del río Beni, expresan la preocupación por los efectos que tienen las actividades mineras ilegales sobre la pesca y el daño que está causando tanto a las poblaciones en las riberas como a los medios de vida del sector pesquero.

Según la CPILAP la reunión, calificada como un éxito total, fue un evento histórico organizado por el Consejo Indígena del Pueblo Tacana (CIPTA) con el apoyo técnico de la Sociedad para la Conservación de la Vida Silvestre (WCS Bolivia). 

“Nuestro encuentro ha marcado un antes y un después en la lucha por la pesca responsable y la protección de nuestros ríos” ¡Juntos, estamos forjando el camino hacia un futuro más brillante para nuestras comunidades y el ecosistema del Río Beni!, se destaca en la página oficial de Facebook de CPILAP.

Se menciona también, que “se han logrado 26 acuerdos fundamentales para proteger nuestros recursos y garantizar un futuro próspero y sostenible para la pesca. Los pescadores se comprometieron a revisar y evaluar el avance de estos acuerdos el próximo 30 y 31 de agosto de este año.

¡Alzamos la voz!

“Juntos, alzamos la voz por la pesca sostenible y el respeto a nuestros derechos indígenas”. Entre las demandas clave, los pescadores exigen:

El respaldo a nuestro derecho esencial de pesca y su importancia para la seguridad alimentaria, suspender inmediatamente cualquier actividad minera ilegal en nuestros ríos, protegiendo nuestro medio ambiente y salud. Parar nuevas concesiones mineras que amenacen la vida acuática y la calidad del pescado, difundir los estudios sobre la contaminación por Mercurio y otros metales pesados e implementar un sistema efectivo de monitoreo de la contaminación por mercurio.

El pronunciamiento de los pescadores surge coincidiendo que el llamado urgente mundial respecto a que los peces de agua dulce (ríos, arroyos y lagos)  son uno de los grupos más impactados por el cambio climático producido por el calentamiento global, principalmente, porque estos dependen de temperaturas y lluvias bien definidas a lo largo del año (en Bolivia se registra el retraso de la temporada de lluvias e inusuales intensidades pluviales) para la conservación de sus ritmos temporales, y para que sus procesos de migración y reproducción no sean perjudicados. (Comité Pro Defensa de Las Áreas Protegidas de Bolivia y CPILAP )

FUENTE: ERBOL