Nuevamente el tema del mercurio en el norte del departamento de La Paz
despertó las alertas en los organismos internacionales y Bolivia está en el ojo
de la tormenta.
La explotación minera en baja escala detonó que se abra una investigación en
la ONU, el organismo internacional a la cabeza de Marcos Orellana, presentó un
informe donde señala que los índices de contaminación en los ríos del norte del
departamento de La Paz están afectados por el químico que es usado para la
extracción de oro.
A raíz de este informe, la ONU, citó a Bolivia, para que brinde
declaraciones sobre la contaminación en sus ríos, “un problema de
contaminación global que nos preocupa”, aseveró Orellana. “En el
informe examino la violación de derechos humanos resultantes tales como el
racismo estructural sufrido por pueblos indígenas y las injusticias ambientales
que se derivan del uso del mercurio en dicha actividad”, complementó.
Entre tanto la cenadora Cecilia Requena, de Comunidad Ciudadana, afirmó que
el tema del uso excesivo del mercurio debe ser controlado para evitar que la
contaminación aumente en territorio nacional.
“Me parece dramático que el Estado boliviano esté acusado por la ONU.
Es muy delicado este tema y nos deja mal parados ante la comunidad
internacional, peor con el discurso que tenemos de la Madre Tierra y derechos.
Ahí quedó en evidencia la impostura e irresponsabilidad del Estado, que no
logra cumplir con el convenio de Minamata”, apuntó.
Bolivia firmó en 2015 el convenio de Minamata, donde se comprometió a
reducir el uso del mercurio.

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