La presidente de YLB dijo que la cuantificación de reservas de litio que posee el país permite que muchas empresas del mundo tengan interés en invertir en Bolivia.
Bolivia trabaja en paralelo con la firma de convenios para el emplazamiento de factorías con tecnología de Extracción Directa de Litio (EDL), con la puesta en marcha de la planta industrial, con el lanzamiento de convocatorias para que otras empresas de diferentes países se sumen al proceso de la industrialización del litio boliviano y estar a la par de Chile y Argentina.
En entrevista con el programa Piedra, Papel y Tinta, de La Razón, la presidenta de Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB), Karla Calderón, sostuvo que estas acciones permiten que las empresas del mundo, en materia del litio, vean a Bolivia como un potencial para la inversión.
Sostuvo que durante las anteriores gestiones se tuvo un retraso en el proceso de industrialización de litio boliviano, pero que ahora se trabaja en acelerar para atender la demanda del carbonato de litio en el mundo.
“La estrategia de aceleración que se está tomando en este punto, la estrategia de poder seguir varios proyectos en paralelo, tomando las mejores tecnologías que en el extranjero se puedan aplicar a nuestros salares, es justamente a lo que nos estaría llevando ya para podernos colocar a la par de nuestros vecinos”, sostuvo Calderón.
Acuerdos
Una de esas acciones en paralelo, es la firma de convenios que se tuvo en diciembre del año pasado con la empresa rusa Uranium One Group que emplazará una planta piloto con tecnología EDL en el salar de Uyuni, Potosí, con capacidad de producción de hasta 14.000 toneladas de carbonato de litio por año.
Ayer, se firmó otro convenio con el consorcio chino CBC (conformado por las empresas CATL, BRUNP & CMOC) para emplazar la planta piloto con tecnología EDL, con capacidad inicial de 2.500 toneladas año que se emplazará en Llipi, salar de Uyuni.
Calderón dijo a la par de esos convenios, en diciembre se inauguró la planta industrial con capacidad de 15.000 toneladas año de carbonato de litio. Para este año se prevé una producción de 4.000 toneladas.
En ese marco, Bolivia trabaja para lanzar una nueva convocatoria para que otras empresas, no solo asiáticas, sino de Europa y otras partes del mundo se sumen al proceso de industrialización.
El presidente Luis Arce instruyó ayer a YLB elaborar una nueva convocatoria para que otras empresas inviertan en la industrialización de los recursos naturales del país como el litio, bajo las normas nacionales y respetando la soberanía.
“El hecho de tener una inauguración de la planta, estas dos firmas de convenios y tener una nueva convocatoria para atraer a nuevos inversionistas para afrontar proyectos en paralelo, estará asegurando por bastantes frentes el apostar por la mejor tecnología para llegar a la meta anhela de tener, no solo el mayor yacimiento de litio, sino a la par por la industrialización”, dijo.
También se firmó un convenio, en junio de 2023, con la rusa Uranium One Group y con la china Citic Guoan para realizar estudios en los salares de Pastos Grandes y Uyuni, respectivamente. Se prevé una inversión de $us 1.400 millones y también la construcción de dos plantas con capacidad de 25.000 toneladas por año, cada una.
Reservas
La presidenta de YLB recordó que, de acuerdo con los últimos estudios, Bolivia tiene 23 millones de toneladas de litio cuantificadas, lo que pone a Bolivia como el país con las mayores reservas del mundo.
Este estudio permite que muchas empresas del mundo tengan interés en invertir en Bolivia en materia del litio.
En “cuantificación todavía lideramos a nivel mundial y es por eso el interés de todos los países para saber qué pasos vamos a tomar porque el carbonato de litio es algo que está en auge en este momento, es un producto estrella por el tema de transición energética, no es una opción sino es algo que va suceder, todo tiene su tiempo, y en el tema de hidrocarburos está pasando”, afirmó.
No obstante, sostuvo que en los últimos meses el precio del carbonato de litio registró una baja y que actualmente está por debajo de los $us 20.000 la tonelada. Pese a ese bajo costo, dijo, aún es un negocio el mercado del litio.
FUENTE: LA RAZÓN