El oro se perfila como una de las nuevas importantes fuentes de ingresos para el país. Ya genera recursos económicos a través del pago de regalías y por otros conceptos, especialmente en el departamento de La Paz, y -en criterio de especialistas en materia económica- podría aportar mucho más al Estado si los diputados y senadores habrían dado curso a la propuesta impositiva presentada hace varios años por las federaciones de cooperativas auríferas o al menos planteado algún proyecto de ley en relación con el tema.
Más allá de lo anterior, queda claro que el metal dorado cobra importancia en la economía nacional y por ello, el Ministerio de Minería anunció la apertura de la tercera sucursal de la Empresa Boliviana del Oro (EBO), que atenderá en la localidad de Riberalta, en el departamento del Beni.
El anuncio lo hizo, semanas atrás, el viceministro de Política Minera, Regulación y Fiscalización, Marcelo Ballesteros López, quien recordó que ya se inauguró la segunda sucursal de la EBO en San Ramón, Santa Cruz, y que la próxima será inaugurada en Riberalta, aunque no precisó la fecha.
Sobre la sucursal de San Ramón, la autoridad afirmó que “la producción y comercialización de oro dará una compra aproximada de entre cuatro y cinco kilogramos por mes” y agregó que la inversión para infraestructura e inicio de operaciones alcanzó los 7 millones de bolivianos.
Se debe recordar que la oficina principal de EBO se encuentra en ciudad de El Alto, en el departamento de La Paz.
El presidente de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), Reynaldo Pardo, calificó de “un momento muy significativo” para la economía del país la apertura de nuevas sucursales de la EBO, por el creciente movimiento económico que se genera a partir de la producción de oro en Bolivia; y añadió que la decisión de fomentar esa actividad, con las regulaciones que deben ser aplicadas, es del presidente Luis Arce Catacora y del vicepresidente David Choquehuanca Céspedes. El objetivo es “hacer que la minería sea el puntal fundamental de la economía del Estado Plurinacional de Bolivia”, agregó.
Pardo aseguró que la Comibol encara con seriedad este desafío, con miras hacia el Bicentenario del Estado Plurinacional de Bolivia, con el objetivo claro de la industrialización como política estatal.
HORNO DE INDUCCIÓN
El viceministro de Políticas Mineras, Marcelo Ballesteros, informó que en Bolivia se cuenta con un horno de inducción que realizará la fundición del oro comprado y tiene capacidad de dos kilogramos. Agregó que está equipado con balanzas de precisión y analizador de difracción de rayos X.
“Esta es una inversión que se enmarca en la política económica para fortalecer las Reservas Internaciones Netas del Banco Central de Bolivia”.
Según datos oficiales, solo en el primer semestre de 2023, la producción de oro alcanzó en términos monetarios a 1.495 millones de dólares, monto superior a lo obtenido en el mismo periodo en 2022, por lo que resulta evidente que existe un incremento en los ingresos generados por la minería del oro.
FUENTE: AGENDA MINERA